En su conferencia mañanera, explicó que la dificultad para la venta del avión que usó su antecesor Enrique Peña Nieto es porque “está hecho a la medida de los clientes de ese entonces”. No es un avión estandar, dijo, sino una aeronave arreglada para viajes de personalidades, de ejecutivos, de gente muy influyente”.
En situaciones normales, agregó, ese tipo de aeronaves, puede trasladar hasta 240 pasajeros, para viajes largos, a Europa y otros continentes, pero el que usó Peña Nieto tiene sólo 80 espacios, porque le adaptaron oficinas, una recámara con baño y otros lujos. Se analizó eliminar ello y reconvertirlo, pero la empresa que lo valoró, sostiene que sería muy difícil y costaría más”.
Precisó que se da mantenimiento permanente al avión presidencial y los costos son mucho menores “ de lo que gastaríamos si yo utilizara ese avión, o cualquier funcionario, los fines de semana, con los ayudantes y quienes me acompañan. Explicó que en un viaje de Peña Nieto a Argentina, tan sólo en internet se pagaron 7 millones de pesos, cifra que él gasta en sus desplazamientos aéreos al interior del país durante un año.
Por ello, dijo, se valora la oferta de una empresa, de intercambiarlo por helicópteros, que pueden emplearse en apagar incendios forestales, pero ello, siempre y cuando se acepte al precio de avalúo. La otra posibilidad es que se entregue a la empresa que va a manejar el el nuevo aeropuerto, junto con el Palenque y de Chetumal, y nuevo aeropuerto de Tulum, y el Tren Maya.
Esa empresa podría rentarlo para viajes a Tulum, Cancún y los demás centros turísticos de la zona y sólo “hay que hacer cuentas para que se pueda tomar esta decisión”.
Insistió en que el presidente de México no puede tener un avión tan costoso, que en sentido técnico,es sólo para viajes largos, al extranjero.