Estimaciones del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA) indican que el flete por barco para una tonelada de maíz desde Sudáfrica a la península de Yucatán, tiene un costo aproximado de 861 pesos, mientras hacerlo por ferrocarril desde el Bajío cuesta alrededor de mil 656 pesos, es decir, una diferencia de 48 por ciento. A raíz de la eliminación del arancel a la importación de maíz y otros productos puesta en marcha por el gobierno en octubre pasado para combatir la inflación, empresarios mexicanos han firmado cartas compromiso para adquirir alrededor de 400 mil toneladas de maíz blanco de Sudáfrica, lo que no sucedía desde 2011.
En México, el uso y consumo del maíz blanco está enfocado en la alimentación humana: para hacer masa y obtener harina y sus derivados para la posterior elaboración de tortillas. El amarillo se destina más como alimento de animales y para la producción industrial de almidón, frituras y hojuelas de maíz.
En octubre pasado, de acuerdo con datos del Servicio de Administración Tributaria (SAT), arribó a los puertos de Veracruz y Altamira un barco proveniente de Sudáfrica el cual desembarcó 40 mil toneladas de maíz blanco. Asimismo, en los próximos días estará llegando a puertos del Golfo otra embarcación con 40 mil toneladas más.
Juan Carlos Anaya, director general del GCMA, destacó que el maíz blanco importado desde Sudáfrica es más competitivo para ciertas regiones del país (noreste, sureste y la península) que traerlo desde estados del Bajío como Guanajuato, Jalisco y Michoacán, debido a que el costo del transporte en México se ha encarecido de manera importante.
De esta forma, según un análisis del organismo privado, a los estados del noreste les cuesta 8 mil 821 pesos una tonelada de maíz traída desde el Bajío, mientras que una importada desde Sudáfrica, les cuesta 8 mil pesos, es decir, una diferencia de 9 por ciento.
En tanto, a los estados del sureste les cuesta 9 mil 56 pesos una tonelada de maíz blanco adquirida de productores del Bajío, mientras que una del país africano les cuesta 7 mil 724 pesos, un ahorro de 14.7 por ciento; asimismo, a los estados de la península les cuesta 8 mil 190 una tonelada del Bajío, cuando desde Sudáfrica la adquieren por 7 mil 790 pesos, una diferencia de 4.8 por ciento.
México sólo importaba maíz blanco de Estados Unidos desde 2013. Las compras a Sudáfrica, el segundo mayor productor de este tipo de grano, justamente después de México, se suspendieron en 2011, cuando se estableció un arancel de 20 por ciento.