Inaugura UNAM foros sobre reforma al PJF

Ciudad de México. Seleccionar a los juzgadores por elección popular, reducir sus ingresos y someterlos a un órgano disciplinario que censure sus sentencias, no resolverán los problemas existentes en el Poder Judicial, y en cambio derogarán avances logrados a lo largo de décadas, afirmó el constitucionalista Diego Valadés Ríos, del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM.

Durante el la inauguración de los “Foros Reforma Constitucional en Materia de Justicia”, autoridades de la máxima casa de estudios coincidieron que dichas mesas de diálogo, que iniciaron este lunes y concluye el jueves 1 de agosto, representan una oportunidad única para reflexionar y dialogar sobre las reformas necesarias que refuercen y mejoren el sistema de justicia mexicano.

Al respecto el Rector de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, reiteró el compromiso de la UNAM con la justicia y el bienestar del país. Estas discusiones, dijo, son una manifestación más de nuestra misión y responsabilidad social para contribuir a una nueva ruta de desarrollo más justa, igualitaria, sostenible y equitativa.

“Es primordial que consideremos la independencia judicial y la división de poderes como ejes centrales de este intercambio de ideas, pues son la garantía para que las decisiones de las y los jueces se basen en el derecho y la jurisprudencia, y no en presiones externas o intereses de grupo”.

Recordó que “estamos cumpliendo dos siglos de haber optado por la forma de gobierno republicana, representativa y federal. Sin duda han sido dos siglos de una evolución política azarosa en donde queda pendiente todavía consolidar plenamente el Federalismo y la división de poderes. En ese sentido, no puede haber retrocesos en estas materias”.

Valadés Ríos, apuntó que se debate una propuesta de reforma constitucional que pretende promover la imparcialidad, garantizar la independencia, combatir la corrupción y mejorar la calidad en la impartición de la justicia. “ La elección de jugadores abriría el camino para la concentración absoluta del poder y se produjera sería inevitable un desenlace adverso para los derechos fundamentales en México”.

Aseveró que nadie puede ofrecer evidencias de que la elección popular sea una garantía de honorabilidad y de capacidad de los elegidos. ”La elección popular es un instrumento de la Democracia, pero no es toda la democracia. Una elección expone a candidatos a presiones políticas. Este no es un escenario ideal para los juzgadores, además en México muchos aspirantes a cargos electivos son víctimas de acciones delincuenciales que suelen quedar impune”.

Al respecto, Hugo Concha Cantú, abogado general de la UNAM, explicó que la reforma judicial debe partir necesariamente de un cuidadoso estudio de su funcionamiento integral, de sus partes y de todo aquello que efectivamente puede mejorar y fortalecer al sistema y a sus partes. “Este fortalecimiento debe reflejarse en un sistema cada vez más eficiente más accesible a la población y más independiente al margen de ideologías políticas o de ocurrencias superficiales”.