El canciller iraní, Abbas Araghchi, de visita en Damasco, afirmó que Irán apoya al ejército y al gobierno de Siria, a lo que el presidente sirio Bashar al Assad respondió que es importante el respaldo de aliados y amigos para hacer frente a los ataques impulsados desde el extranjero, y prometió acabar con el terrorismo en el país.
El ministro de Exteriores de nuestro país consideró la reciente activación de grupos terroristas parte de una conspiración de enemigos de la estabilidad y seguridad de la región que demuestra la coincidencia de los objetivos de los terroristas con los de Estados Unidos y el régimen israelí de seguir incitando a la guerra y la inseguridad en la región, y compensar los fracasos de las fuerzas de Tel Aviv en la lucha contra el frente de resistencia, indicó la cancillería iraní en un comunicado.
Unidades del ejército sirio reforzaron sus líneas defensivas con potencia de fuego adicional, personal y equipo, y repelieron con éxito ataques de organizaciones terroristas, además de prevenir cualquier brecha, informó el ministerio sirio de Defensa.
Nuestras fuerzas armadas lograron asegurar varias zonas tras expulsar a los terroristas, en particular a Qalaat Madiq y Maardas, al matar a decenas de ellos mientras el resto huían, agregó.
La televisión estatal siria informó que unos milicianos de HTS y grupos afiliados fueron abatidos en los últimos tres días.
El OSDH, con sede en Reino Unido, confirmó que las fuerzas gubernamentales enviaron refuerzos significativos en las últimas horas.
Desde la madrugada de ayer, aviones de guerra han lanzado ataques contra zonas alrededor de Mork, Khan Sheikhoun, Kafr Nabl, Hazarin y Tal Kokba, en la provincia de Idlib y zonas septentrionales de Hama recientemente capturadas por HTS. No hubo información de víctimas.
Según el OSDH, los intensos bombardeos frenaron el avance de los rebeldes en las zonas rurales de Hama.
HTS y las facciones opositoras aliadas avanzaron el sábado en Hama, al tomar el control de numerosas ciudades y pueblos en la zona norte de la provincia.
El gobierno sirio perdió el control total de Alepo, la segunda ciudad más importante del país, por primera vez desde el inicio de la guerra civil en 2011, tras una ofensiva relámpago que asestó un duro golpe al presidente Bashar al Asad, que dejó 412 muertos, en su mayoría combatientes de ambos bandos.
En el complejo caleidoscopio de la guerra civil siria, con fuerte presencia de fuerzas extranjeras, otro frente se intensificó ayer 40 kilómetros al norte de Alepo, donde combatientes de HTS arrebataron a las fuerzas kurdas la ciudad de Tal Rifat y localidades aledañas, de acuerdo con el OSDH.
En tanto, las Fuerzas Democráticas Sirias, apoyadas por Estados Unidos, anunciaron el comienzo de una movilización general contra la ofensiva iniciada por HTS y otras formaciones armadas respaldadas por Turquía, que combate a los independentistas kurdos.
El gobierno de Estados Unidos aseguró, a través del vocero del Consejo de Seguridad Nacional, Sean Savett, que Al Assad perdió el control de Alepo por su dependencia de Rusia e Irán, junto con su negativa a seguir adelante con un proceso de paz trazado en 2015 por la Organización de Naciones Unidas. Crearon las condiciones que ahora se están desarrollando, aseguró en un comunicado Savett.
Los combates actuales entre las fuerzas rebeldes y el ejército en Siria tienen graves implicaciones para la paz regional e internacional, advirtió el enviado especial de la Organización de Naciones Unidas para Siria, Geir O. Pedersen.
La Liga Árabe exigió respetar la integridad y la soberanía de Siria, al tiempo que Venezuela condenó las hostilidades contra Damasco y exigió el cese del apoyo occidental e israelí.