Lamentan líderes mundiales la partida de un luchador incansable

La Jornada.- Líderes y figuras internacionales recordaron ayer a Desmond Tutu, y coincidieron en que el arzobispo es una de las mayores influencias en la defensa de los derechos humanos.


El secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Antonio Guterres, comentó que “fue una figura mundial destacada por la paz y una inspiración para generaciones de todo el mundo. Durante los días más oscuros del apartheid, fue un faro brillante para la justicia social, la libertad y la resistencia no violenta”.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo estar “desconsolado” por el fallecimiento de Tutu, pero afirmó que su legado trasciende las fronteras y tendrá “eco a través de los tiempos”, mientras el ex presidente Barack Obama lo recordó como “mentor, amigo y brújula moral”, que peleó contra la injusticia en Sudáfrica y en otras partes del mundo.
El premier británico, Boris Johnson, quien se declaró “profundamente triste” por el fallecimiento de un hombre que ha descrito como “figura crítica” en la derrota del apartheid y la construcción de una nueva Sudáfrica, señaló que “será recordado por su liderazgo espiritual y su incontenible buen humor”.
Para la reina de Inglaterra, el arzobispo fue un “campeón incansable de los derechos humanos en Sudáfrica y todo el mundo”, además de que “la pérdida del arzobispo Tutu se sentirá en su país, pero también en Gran Bretaña, Irlanda del Norte y toda la Commonwealth”.
El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, recordó al activista como “un profeta y sacerdote, un hombre de palabra y acción que encarnó la esperanza y la alegría que fueron los cimientos de su vida”.
En un mensaje enviado por el Vaticano, “su santidad el papa Francisco recibió con pesar la muerte del arzobispo, consciente de su servicio a la palabra de Dios fomentando la igualdad racial y la reconciliación en Sudáfrica”.
El presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, destacó que “inspiró a una generación de líderes africanos que abrazaron formas no violentas en la lucha por la liberación”. El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, aseguró que su país comparte el “dolor universal” por el deceso del arzobispo.