Rusia ha concentrado desde fines de 2021 decenas de miles de soldados frente a Ucrania, acrecentando los temores de una invasión. Moscú niega cualquier intención de invasión, pero exige garantías para su seguridad, entre ellas el compromiso de que Ucrania, una ex república soviética, no será nunca admitida como miembro de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Estados Unidos y la OTAN se niegan a aceptar esas exigencias, pero tanto los occidentales como Rusia han dejado hasta ahora abierta la vía negociadora.
El ministro ucranio de Relaciones Exteriores, Dmytro Kuleba, destacó en una conversación telefónica con su homólogo francés Jean-Yves Le Drian "la importancia de mantenerse vigilantes y firmes en los contactos con Rusia", según un comunicado de su ministerio.
Sin embargo abogó por una "solución política y diplomática" a la crisis.
Horas antes, Biden anunció que movilizará "tropas a Europa del este y a países de la OTAN a corto plazo, no muchas". Estados Unidos ya puso en alerta a 8 mil 500 soldados para reforzar a la OTAN.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, había estimado el viernes que con más de 100 mil soldados concentrados en la frontera con Ucrania, Rusia tiene suficientes fuerzas para una invasión, pero subrayó que un conflicto entre Kiev y Moscú "no es inevitable".
"Todavía hay tiempo y espacio para la diplomacia", declaró. (Boletín)