“No hay ningún riesgo en absoluto”, afirmó Grossi, al margen de un desplazamiento a Ereván, en Armenia, un día después de que las fuerzas rusas expulsaran al director de la central.
El lunes, tras haber estado más de dos días días detenido por las fuerzas rusas, que ocupan la central nuclear, el director de la planta, Igor Murashov, fue expulsado.
Pero, según Grossi, lo más importante respecto a Murashov es que fue liberado y está de nuevo junto a su familia.
El director de la central nuclear de Zaporiyia fue puesto en libertad en territorio controlado por el ejército ucraniano, tras haber sido arrestado por una “patrulla rusa” cuando iba de camino a la planta, sita en la ciudad de Ernogodar (sur), controlada por los rusos.
La central de Zaporiyia está en manos de las tropas rusas desde principios de marzo, pero si situación no dista mucho de la línea de demarcación que separa los territorios controlados por Kiev de los ocupados por Moscú.
Rusia y Ucrania se han acusado mutuamente de haber atacado la central en los últimos meses.