Las demandas, en gran parte de los republicanos, se enfocan en las reglas sobre la votación por correo, la votación anticipada, el acceso de los votantes, las máquinas de votación, el registro de votantes, el conteo de boletas en ausencia mal marcadas y el acceso de los observadores electorales partidistas.
Es la mayor cantidad de litigios antes de una elección y es probable que sea una vista previa de un panorama postelectoral potencialmente polémico.
La estrategia nació en parte del fracaso de las y los aliados del expresidente Donald Trump para desafiar y anular con éxito los resultados libres y justos de las elecciones presidenciales de 2020.
El esfuerzo electoral de 2020 fue una respuesta encabezada por una colección de abogados cada vez menos preparados que incluían a Rudy Giuliani. El esfuerzo de hoy es una campaña más formalizada, bien financiada y bien organizada dirigida por el Comité Nacional Republicano y otras organizaciones legales.