Falleció en su casa el jueves por la noche, a raíz de un derrame padecido dos semanas antes.
"Hoy lamentamos la muerte de una formidable patriota", declaró el presidente sudafricano Cyril Ramaphosa en un comunicado. "Hemos perdido a otra gran figura de una generación especial de dirigentes, a quienes debemos nuestra libertad y a quienes debemos nuestro compromiso en seguir construyendo la Sudáfrica a la que han dedicado todo", añadió.
Nacida en Johannesburgo, en el seno de una familia de la comunidad india del país, estudió Derecho en el Reino Unido.
Su vida cambió con la masacre de Sharpeville de 1960, cuando la policía del apartheid mató a 69 manifestantes pacíficos negros, la mayoría a balazos, por la espalda.
El Congreso Nacional Africano (ANC) fue prohibido y el movimiento clandestino rompió con la no violencia. Su brazo armado, Umkhonto we Sizwe ("la punta de lanza de la Nación"), instigó una ola de atentados.
Frene Ginwala fue hasta Mozambique para ayudar a destacados miembros del ANC a abandonar Sudáfrica.
En los años 1970, se convirtió en una figura de referencia en los medios internacionales, y viajó por todo el mundo para luchar contra el apartheid, llamando la atención sobre las violaciones de los derechos humanos en su país.
"Dio a conocer a la comunidad internacional los crímenes del régimen represivo y desacreditado en Sudáfrica gracias a su afinada pluma", destacó el portavoz del parlamento, Moloto Mothapo.
Ginwala fue nombrada presidenta de la Asamblea Nacional en 1994, paralelamente al nombramiento de Nelson Mandela como nuevo presidente, al final del régimen de apartheid.
Ocupó este cargo hasta 2014.
"Muchos de los derechos y beneficios materiales que hoy disfrutan los sudafricanos tienen su origen en el programa legislativo del primer parlamento democrático bajo la dirección de Frene Ginwala", subrayó el presidente Ramaphosa.
Para la Fundación Nelson Mandela, Frene Ginwala fue un "pilar de la lucha contra el apartheid".