La cúpula del alto tribunal quedó integrada por seis magistrados del izquierdista partido Libertad y Refundación (Libre), en el poder, cinco del Nacional y cuatro del Liberal, ambos conservadores, producto de un acuerdo logrado el jueves tras cuatro intentos fallidos de elección desde fines de enero.
"Hemos electo una Corte Suprema de Justicia en la que el partido Libertad y Refundación no tiene mayoría, no vamos a una asamblea nacional constituyente para impulsar sus planes ideológicos socialistas", dijo Tomás Zambrano el jefe de la bancada del partido Nacional en la cámara legislativa,.
Castro llegó a la presidencia en enero de 2022, tras ganar las elecciones el mes de noviembre anterior con la agrupación Libre, y ha planteado la posibilidad de implementar un proceso constituyente para redactar y aprobar una nueva Carta Magna.
La mandataria es esposa del exgobernante Manuel Zelaya, quien fue derrocado en un golpe de Estado militar en 2009, después de convocar al final de su mandato a una consulta popular que, según sus opositores, pretendía usar para impulsar reformas constitucionales y perpetuarse en el poder.
Los nuevos magistrados, cuya gestión concluirá en 2030, fueron elegidos de una planilla única, negociada entre las agrupaciones políticas mayoritarias, y obtuvieron más de 100 votos de los 128 escaños del Congreso, de acuerdo con los legisladores.
Según analistas y organizaciones anticorrupción, el alto tribunal saliente era controlado por el partido Nacional del expresidente Juan Orlando Hernández, extraditado en 2022 a Estados Unidos, donde aguarda un juicio por narcotráfico, y por una facción del partido Liberal.
"Elegimos una Corte Suprema de Justicia independiente del narcotráfico, independiente del crimen organizado, independiente de la narcodictadura", dijo el jefe de la bancada de Libre en el Congreso Rafael Sarmiento.