A la crisis política se suma que este fin de semana la cárcel central de Puerto Príncipe fue atacada por el crimen organizado, y se fugaron tres mil 700 reos, muchos de ellos, integrantes de esas mismas bandas.
Diez internos fallecieron durante la masiva fuga, pero aún se desconocen las causas.
“No puedo decir nada sobre los prisioneros que murieron. Quizás intentaron escapar, pero la investigación policial lo determinará todo”,
dijo un testigo.
Además de la cárcel, las pandillas atacaron comisarías de policía, comercios y el aeropuerto de Haití, suspendiendo la actividad de las líneas aéreas, e imposibilitando salir de Haití.
Por ello, el gabinete impuso estado de emergencia y toque de queda. La embajada de México hizo una serie de recomendaciones para los paisanos que viven ahí y quieran salir de territorio haitiano.
“Nuestra recomendación a la comunidad en caso de que se requiera salir del país, es seguir atentos a los anuncios oficiales de las aerolíneas para que a la brevedad posible, quien así lo desee, pueda salir del país”,
señaló el embajador de México en Haití, Daniel Alberto Cámara.
También pidió hacer acopio de alimentos, agua y combustible, no circular en las calles ni realizar traslados que no sean esenciales.
“Estamos en comunicación telefónica con la comunidad mexicana establecida en Haití, para conocer cuál es el estado de ellos, de ellas, de sus familias y afortunadamente hasta el momento, no tenemos ninguna situación de emergencia”,
agregó Cámara.
En medio de este caos, se realizaron marchas para exigir la renuncia del primer ministro Ariel Henry.