El reconocimiento otorga a los territorios protección legal como reservas que deben defenderse de las invasiones de madereros ilegales, mineros de oro y ganaderos.
Lula, que se comprometió a legalizar el mayor número posible de reservas, firmó en Brasilia el reconocimiento de las tierras de Aldeia Velha y Cacique Fontoura, situadas en los estados de Bahía y Mato Grosso, respectivamente.
El líder izquierdista reconoció hasta ahora 10 territorios indígenas desde que asumió en enero de 2023 su tercer mandato no consecutivo.
Lula afirmó en un acto que la semana pasada recibió de su ministro de Justicia una lista de seis territorios indígenas listos para ser reconocidos, pero optó por aplazar la legalización de los otros cuatro.
"Decidimos legalizar sólo dos", dijo Lula, añadiendo que los otros cuatro territorios están actualmente ocupados por campesinos o personas socialmente vulnerables, y que el gobierno quiere que se marchen pacíficamente.
Expresó que algunos gobernadores estatales le habían pedido más tiempo para resolver la cuestión, y reconoció que su decisión podría haber frustrado a algunos indígenas.
"Pero tengo que ser prudente y ofrecer a esas personas otras alternativas", afirmó.