Durante las celebraciones por el Día de la Independencia, el mandatario buscó dar señales de fortaleza con la firma de un pacto político junto con gobernadores de la oposición y luego convocó a una multitud de seguidores a un desfile militar por las calles de Buenos Aires.
El gobierno de Milei anunció anoche que implementará una política de cielos abiertos, a fin de que cualquier aerolínea extranjera vuele sin restricciones en sus rutas hacia y desde Argentina, en una de la primeras medidas del ministro de Desregulación y Transformación, Federico Sturzenegger, y en lo que representa un ataque directo a la línea de bandera Aerolíneas Argentinas, que había quedado dentro de las empresas que no se podían privatizar.
Si bien Milei ha logrado en seis meses desacelerar la inflación y realizar un fuerte recorte en el gasto público, la contracara ha sido una profundización de la recesión económica heredada, con una caída de 5.1 por ciento del producto interno bruto y un aumento del desempleo a 7.7 por ciento en el primer trimestre de este año.
En la última semana los mercados mostraron signos de desconfianza sobre el rumbo del plan económico y el dólar alcanzó su máximo histórico en el mercado informal, mientras los bonos sufrieron caídas.
Con la excusa de la fecha patria, Milei convocó a gobernadores y ex presidentes de distintas fuerzas políticas a la firma del llamado Pacto de Mayo, un texto de carácter fundacional que incluye 10 puntos entre los que destacan la inviolabilidad de la propiedad privada, el equilibrio fiscal, la reducción del gasto público, la modernización de la educación y reformas tributaria, laboral y previsional.
El partido oficialista La Libertad Avanza no gobierna ninguno de los 24 distritos del país, por lo que respondieron a la convocatoria 18 gobernadores que pertenecen a partidos provinciales o fuerzas opositoras calificadas de dialoguistas.
Cinco gobernadores alineados con la ex presidenta Cristina Fernández (2007-2015) no acompañaron la iniciativa, entre ellos Axel Kicillof, de la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito del país.
Milei también había invitado a los ex presidentes de todos los colores políticos, pero sólo acudieron el peronista Adolfo Rodríguez Saá, quien presidió el país durante una semana en 2001, y el conservador Mauricio Macri (2015-2019).
Tras la firma del acuerdo, Milei planteó que desea un Estado sin regulaciones, donde despedir trabajadores sea fácil, y en el que la educación esté conectada con las necesidades económicas, señaló Infobae.
Milei regresó luego a Buenos Aires para asistir a un desfile militar. Esta tradición se interrumpió durante el anterior gobierno de Alberto Fernández (2019-2023).
Exultante, Milei saludó a sus seguidores y en varias ocasiones gritó el lema de su campaña a la presidencia: Viva la libertad carajo.