Funcionarios de la Guardia Nacional informaron que 309 personas habían sido rescatadas desde el sábado, y 38 de ellas fueron trasladadas a hospitales para recibir tratamiento por lesiones no reveladas.
La policía estatal de Nuevo México indicó que dos personas murieron como resultado de una inundación repentina, pero de momento no se dio información sobre las víctimas ni las circunstancias de sus muertes.
Las autoridades de la ciudad de Roswell señalaron que los niveles de agua habían disminuido en muchas partes de la ciudad, pero seguían siendo altos en el centro de la ciudad. Todas las carreteras que conducen hacia y desde la ciudad estaban cerradas el domingo, añadieron las autoridades.
El Servicio Meteorológico Nacional en Albuquerque afirmó que cayeron 14.7 centímetros de lluvia en Roswell el sábado, superando el récord previo para un solo día, de 14.6 centímetros registrado el 1 de noviembre de 1901, es la ciudad del sureste de Nuevo México.
Los meteorólogos advirtieron que era posible que se produjeran más lluvias e inundaciones repentinas.
Al momento que varias viviendas y negocios empezaron a inundarse el sábado por la noche, las autoridades informaron que siete personas fueron rescatadas cuando su auto fue arrastrado por las aguas. Otros vehículos fueron arrastrados al cauce de un río.
La estación de televisión KOAT de Albuquerque reportó que el jefe de policía del condado Chaves, Mike Herrington, fue visto parado encima de su vehículo rodeado por las aguas de la inundación. Herrington dijo que tuvo que subir al techo de su vehículo cuando éste y otros más quedaron varados en el agua que llegaba hasta las ventanas.
Las autoridades establecieron un refugio en el recinto ferial del estado del este de Nuevo México para los residentes de Roswell desplazados por las inundaciones.
“Hemos trabajado toda la noche y continuamos trabajando con equipos de rescate en aguas rápidas y otras agencias asociadas para ayudar a nuestros conciudadanos a llegar a un lugar seguro”, dijo en un comunicado el mayor general Miguel Aguilar, oficial militar responsable del aparato administrativo de la Guardia Nacional de Nuevo México.
Autoridades de la Guardia Nacional aseveraron que seguirán “activos, ayudando a Roswell todo el tiempo que sea necesario” con 57 efectivos en el área.
Añadieron que la Guardia tiene varios vehículos tácticos en la zona, capaces de rodar en 1.2 metros de agua.