“Sin duda lo terminamos, pero lo que queremos es terminarlo con anticipación para operarlo, dejarlo operando, no entregarlo 15 días antes de que terminemos, sino poder operarlo desde finales del año próximo, que ya empiece a operar (…) llueva, truene o relampaguee”, expuso a la prensa el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Admitió que hubo dificultades en el tramo de Cancún a Tulum (Riviera Maya, una de las principales zonas hoteleras del país), porque con la pretendida vía aérea o “segundo piso” se habría gastado más tiempo y dinero, así que se optó por irse a ras de tierra para no afectar la carretera.
Con los propietarios de los terrenos se hicieron “expropiaciones concertadas” e incluso, dijo, algunos que no están cobrando porque reconocen que con el tren se facilitará la llegada de sus propios trabajadores y de los turistas. “Se han portado de primera”, expresó el mandatario.
Hay hoteleros que poseen 300 hectáreas pero sus inmuebles están en 100 de éstas, “entonces, el tren va atrás y atraviesa un kilómetro de su propiedad”.
La empresa Alstom empezará a entregar los trenes en julio de 2023 y, obviamente, para entonces ya se debe tener listo todo el circuito en la Península de Yucatán.
Puntualizó que las empresas a cargo de la construcción de los cuatro tramos grandes (Mota-Engil, Carso, Indi e Ica) han ratificado su compromiso de cumplir en tiempo, mientras el citado tramo Cancún-Tulum lo hará el Grupo México y, en otra parte, el Ejército, por lo cual apenas se inaugure el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, el 21 de marzo entrante, los ingenieros militares se trasladarán al sureste.
López Obrador defendió al titular de Fonatur, su colaborador y paisano; en principio consideró que para ser un buen funcionario “no es decisivo” tener carrera universitaria. Señaló que May es un hombre con principios, ideas, honesto y trabajador. “Yo quisiera 100 así (pero) nada más tenemos 50”, bromeó.
También habló de un acuerdo con empresas que dan mantenimiento a carreteras, con lo cual se lograrán ahorros por 3 mil millones de pesos en lo que resta del sexenio, recursos que serán canalizados para la construcción de caminos rurales en la montaña de Guerrero, tal como ocurre en Oaxaca, donde se levantan vías de concreto de las comunidades hacia las cabeceras municipales. Sobre el mismo tema, sostuvo que fuera de los episodios en la Autopista del Sol, en el resto del país se ha reducido considerablemente la toma de casetas.
En otro asunto, señaló que se analizará la situación de las tiendas departamentales del Issste, que le fueron heredadas en situación ruinosa, por lo que ahora es necesario, al igual que en otros sectores, enderezar entuertos.
Habló además de la necesaria coordinación general de equipos para la aplicación de programas sociales. “No hay que sectorizarnos, nada de sectas”, advirtió. (boletín)