Suecia y Finlandia “están en estrecho contacto con Turquía, y yo viajaré Turquía para encontrarme con el presidente turco en un futuro próximo”, dijo Stoltenberg, quien, sin embargo, no adelantó una fecha para esa visita.
En julio de este año Suecia y Finlandia presentaron formalmente sus solicitudes de adhesión a la OTAN, un selecto club donde el acceso únicamente es posible mediante el voto unánime de sus países miembros.
Sin embargo, Turquía de inmediato objetó esas adhesiones y adelantó que únicamente las permitirá caso esos dos países cumplan acuerdos específicos.
Turquía alega que Suecia ofrece un refugio a personas que el gobierno turco considera “terroristas” y además los dos países adoptan sanciones contra Ankara por su participación militar en Siria.
En el marco de la cumbre que la OTAN realizó a fines de junio en Madrid, Turquía accedió a permitir la firma de los protocolos de Suecia y Finlandia, pero presentó una lista de exigencias a los dos aspirantes para levantar el veto en forma definitiva.
Hungría es otro de los países de la OTAN en retrasar la ratificación formal de la adhesión de Suecia y Finlandia a la alianza militar transatlántica.
De acuerdo con Stoltenberg, ese proceso de ratificación “está en la agenda del parlamento húngaro”.
Hace una semana, el nuevo primer ministro de Suecia, Ulf Kirstersson, también dijo estar dispuesto a viajar a Turquía en busca de romper el bloqueo turco a la adhesión a la OTAN.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, adelantó que estaba listo para recibir la visita del primer ministro sueco, pero advirtió que su país no ratificará la adhesión si no se cumplen los acuerdos.