Porque, señala, esto sucede “en condiciones en que el régimen de Kiev trata de atacarlas con ayuda técnica y militar, así como información de inteligencia, de Estados Unidos”.
Es imposible –asegura la cancillería rusa– tratar con la administración estadunidense "como si nada pasara", cuando no oculta que pretende infligir una "derrota estratégica" a Rusia en Ucrania, donde Estados Unidos y sus aliados de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) “están enviando cada vez más armas”.
No debe quedar duda: “Hasta que Washington –y lo afirmamos con toda certeza– reconsidere su línea hostil hacia Rusia y abandone la política de amenazas crecientes a nuestra seguridad nacional, cualquier 'señal positiva' o 'paso hacia' los temas planteados por Estados Unidos en el contexto del cumplimiento de lo pactado en el START (siglas en inglés del Tratado sobre Reducción y Limitación de armas ofensivas estratégicas) será injustificado, extemporáneo e inadecuado”.
Advierte: “Cualquier acción hostil de Estados Unidos, que ponga en entredicho la validez de las disposiciones más importantes del START, tendrá una respuesta adecuada nuestra”.
Esta es la parte medular del documento con que Rusia rechazó este miércoles reanudar las inspecciones recíprocas y también celebrar las sesiones de la comisión consultiva bilateral sobre ese tratado.
“Estados Unidos –sostiene– violó con sus acciones el procedimiento estándar de las visitas de inspectores al bloquear la posibilidad de que Rusia (al denegar las visas y prohibir el aterrizaje de aviones rusos) realizara inspecciones en su territorio, lo cual creó evidentes ventajas para sí”.
En este sentido, subraya, ante la insistencia de Estados Unidos de efectuar inspecciones de improviso, Rusia se vio obligada a no permitir temporalmente el régimen de inspecciones en sus instalaciones estratégicas, posibilidad que, indica, no se contradice con el START, el último gran acuerdo de control de armamento nuclear entre los dos arsenales más grandes, vigente hasta 2026.
Tras reafirmar su compromiso inquebrantable con el START, como una herramienta importante para mantener la seguridad internacional, Rusia planteó que “hay garantizar el buen funcionamiento de todos los mecanismos de los tratados en estricta conformidad con los principios de paridad e igualdad de las partes, vulnerados por las acciones de Estados Unidos”.