La Jornada.- Un adolescente migrante no acompañado hondureño de 17 años murió tras ser encontrado inconsciente en un refugio de Florida el 10 de mayo, según una notificación a los congresistas estadunidenses de la oficina de refugiados del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS por sus siglas en inglés).
El adolescente, Ángel Eduardo Maradiaga Espinoza, había sido acogido por el HHS el 5 de mayo en el Gulf Coast Jewish Family and Community Services de Safety Harbor, en Florida, según recogía la notificación.
El menor fue trasladado a un hospital y tras una hora de intentos de reanimación, fue declarado muerto.