Los gobiernos de ambos países declararon en un comunicado conjunto que los fondos para proteger el bosque se distribuirán a lo largo de los próximos cuatro años. Se tratará de una colaboración entre los bancos estatales de Brasil y la agencia de inversión francesa. Según indicaron los dos países, también será bienvenido el capital privado.
El presidente francés Emmanuel Macron y su homólogo brasileño Luiz Inácio Lula da Silva se reúnen esta semana para reactivar la relación entre los países después de años de fricciones con el expresidente Jair Bolsonaro, estrechar la cooperación para salvaguardar la selva tropical e impulsar el comercio.
Macron comenzó su visita de tres días a Brasil en la ciudad amazónica de Belém, donde se reunió con su viejo aliado Lula. A continuación, el presidente francés tomó un barco hasta la isla Combu para reunirse con líderes indígenas.
Tanto Macron como Lula presenciaron una protesta de Greenpeace Brasil con pancartas en las que se leía “No al petróleo en la Amazonia”. El gobierno de Brasil ha contemplado la posibilidad de permitir la extracción de petróleo en una región cercana al estado de Pará, donde se encuentra Belém.
Lula dijo durante un discurso que la visita de Macron forma parte de un esfuerzo global para reforzar la protección de la selva tropical.
“Queremos convencer a los que ya han deforestado de que tienen que contribuir de forma importante a los países que todavía tienen sus bosques para mantenerlos en pie”, dijo Lula en un discurso junto al presidente francés.
El gabinete de Macron informó antes del viaje que un posible acuerdo comercial europeo con el bloque sudamericano Mercosur no estaría en la agenda. El presidente francés se opone a un acuerdo de este tipo mientras los productores sudamericanos no respeten las mismas normas medioambientales y sanitarias que los europeos, después de que los agricultores plantearan sus preocupaciones durante protestas en Francia y otras partes de Europa.
El presidente francés condecoró al líder indígena Raoni Metuktire con la prestigiosa medalla de la Legión de Honor por sus esfuerzos en la conservación de la selva tropical.
“Usted estaba en Europa y yo prometí venir aquí a su bosque y estar con su gente en este bosque que es codiciado”, dijo Macron al líder indígena, según la radio francesa RFI. “El presidente Lula y yo tenemos una causa común por uno de nuestros amigos en esta tierra que les pertenece a ustedes”.
Lula y Macron buscarán “establecer un rumbo común” para luchar tanto contra el cambio climático como contra la pobreza, dijo la oficina de Macron, ya que Brasil será anfitrión de la cumbre del G-20 en Río de Janeiro en noviembre y de las conversaciones de la ONU sobre el clima en Belém el próximo año.
El miércoles, Macron y Lula participarán en la ceremonia de botadura de un submarino propulsado por diésel construido en Brasil con tecnología francesa en el astillero de Itaguai, a las afueras de Río de Janeiro. A continuación, el presidente francés se dirigirá a la metrópolis de Sao Paulo para reunirse con inversores brasileños. El jueves, el presidente francés se dirigirá a Brasilia para reunirse de nuevo con Lula.