El sheriff del condado de Cooke, Texas, Ray Sappington, confirmó que al menos siete personas perdieron la vida en el área de Valley View, al norte de Dallas.
En esta región, numerosas casas fueron destruidas, al igual que una parada de camiones donde varias personas buscaron refugio, una gasolinera y vehículos que quedaron volcados en una carretera interestatal.
Los equipos de rescate continúan trabajando para remover escombros y buscar más víctimas.
En el condado de Mayes, Oklahoma, y en el norte de Arkansas también se confirmaron múltiples muertes y daños materiales significativos.
Se estima que alrededor de 470 mil personas se quedaron sin electricidad debido al paso de los tornados, afectando a áreas desde Texas hasta Kansas, Misuri, Arkansas, Tennessee y Kentucky.
Las autoridades locales y los servicios de emergencia están desplegados en las zonas afectadas, tratando de restablecer los servicios básicos y brindando apoyo a los damnificados.