El gobierno panameño construyó el nuevo conjunto de viviendas, llamado Nuevo Cartí, en la comarca indígena de Guna Yala, frente al Caribe, para reubicar a unos mil 200 habitantes de Cartí Sugdupu, una minúscula isla amenazada con desaparecer bajo las aguas por el aumento del nivel del mar.
“La crisis climática que está viviendo el mundo nos ha obligado, aquí en Panamá, a hacer el traslado de la isla a esta urbanización de alrededor de 300 casas”,
dijo el presidente Laurentino Cortizo.
Las viviendas fueron construidas en un terreno de 14 hectáreas, y la inversión ascendió a 12.2 millones de dólares.
Los habitantes empezarán a mudarse del 3 al 6 de junio desde su isla, la cual se encuentra a unos 15 minutos de distancia en lancha. De acuerdo con el Gobierno, ellos son los primeros desplazados por el cambio climático en Panamá.
De manera simbólica, Cortizo entregó personalmente un centenar de llaves, pero aseguró que todas las personas ya tienen acceso a su nuevo hogar.
“Estoy emocionada. Las casas están bonitas, son chicas, pero muy confortables”, dijo Vidalma Yánez, una de las beneficiadas.
Cartí Sugdupu, la isla en la que vivían los indígenas panameños, es del tamaño de cinco campos de futbol, donde las casas tienen pisos de tierra, y paredes y techos de caña, madera y láminas de zinc. Ahí, no tenían acceso al agua potable y no tenían luz eléctrica de manera continua; además sus baños a la orilla del mar, eran comunales.
Esta es una de las 365 islas del archipiélago de la comarca de Guna Yala, de las cuales, varias se encuentran bajo riesgo de inundación. Las 49 que están habitadas se encuentran apenas entre 50 centímetros y un metro sobre el nivel del mar.