La llegada de la estación monzónica ha provocado inundaciones y corrimientos de tierra en todo el sur de Asia durante la última semana, con al menos 195 muertos y casi 200 desaparecidos en una catástrofe ocurrida en la vecina India.
Las lluvias azotaron el norte de Pakistán, provocando inundaciones, derrumbes de edificios y aumentando el riesgo de electrocución.
"En Lahore se batió de nuevo el récord de precipitaciones de los últimos 44 años", dijeron los responsables de servicios públicos de la provincia nororiental de Punjab, donde las autoridades contabilizaron seis muertos y advirtieron de que se esperaban inundaciones repentinas en el sur esta semana.
En Khyber Pakhtunkhwa, 12 niños figuran entre las dos docenas de personas fallecidas en los tres últimos días de lluvias e inundaciones en la provincia noroccidental, según dijo a Reuters Anwar Shehzad, portavoz de su agencia de gestión de catástrofes.
Organizaciones mundiales, como Naciones Unidas, consideran a Pakistán uno de los países más vulnerables ante las condiciones meteorológicas extremas y el cambio climático. En 2022, las inundaciones causaron estragos, mataron a más de 1.700 personas y desplazaron a millones.