El reporte de la Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas (ONU-DH) se suma a las críticas contra el gobierno del presidente Daniel Ortega, que después de las graves protestas antigubernamentales de 2018, ha encarcelado y expulsado a cientos de opositores, así como retirado el registro a miles de oenegés, universidades y medios de comunicación.
El informe señala que en mayo de este año "131 personas consideradas como opositoras se encontraban bajo detención arbitraria, lo que supone un marcado aumento en comparación con las 54 personas de junio del año pasado, según informes de la sociedad civil".
También afirma que entre junio y julio del 2024 se produjeron otras 10 detenciones arbitrarias.
"Las autoridades continúan persiguiendo no sólo a quienes expresan opiniones disidentes, sino también a cualquier persona u organización que actúe de forma independiente o que no esté directamente bajo su control", agrega el reporte.
Especificó que esto incluía a defensores de derechos humanos, medios de comunicación independientes, organizaciones no gubernamentales y "cualquier otra entidad que abogue por cambios sociales o políticos sin supervisión gubernamental”. (Boletín)