El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, anunció esta semana una reunión de directores nacionales de armamento de países aliados, para hacer planes a largo plazo que permitan proveer a Ucrania y reponer su propia reserva de armas.
“Conversarán sobre cómo nuestras bases industriales de defensa pueden equipar mejor a las fuerzas de Ucrania en el futuro, con las capacidades que necesitan”, dijo en una reunión, en la Base de la Fuerza Aérea Ramstein en Alemania, del Grupo de Contacto para Ucrania, en el que 50 países actualmente respaldan los esfuerzos en medio de la guerra.
El viernes, el jefe de adquisición de armas del Pentágono, Bill LaPlante, dijo que la reunión será el próximo 28 de septiembre en Bruselas.
La meta es determinar cómo continuar trabajando para aumentar la producción de capacidades clave y resolver los problemas de la cadena de suministros, así como incrementar la interoperatividad e intercambiabilidad de “nuestros sistemas”, explicó LaPlante a los reporteros en el Pentágono.